jueves, 26 de marzo de 2015

MI COLUMNA DE HOY

Playas insufribles
Parece mentira, el consumo en una mesa en uno de los paraguas populares de la playa de Boca Chica sale más caro que el de un resort en Bávaro…
Los dueños de casetas que controlan las mesas y sillas  en la playa pública son recurrentes en la práctica de exagerar los precios de comidas y bebidas, cobrando sumas astronómicas que no se corresponden con lo real y justo.
Ni siquiera tienen un menú con los precios para que los clientes se puedan guiar con antelación para ver el valor de los comestibles y bebidas que expenden.
Ello, unido a la extorsión de los parqueadores que operan en las calles aledañas a la playa, que cobran más caro que un valet parking y un parqueo privado, hacen de Boca Chica un balneario insufrible, que no vale la pena visitar.
Pero si usted prefiere la playa de Juan Dolio, se encuentra con una situación similar.
De igual manera los dueños de locaciones en la playa están cometiendo el mismo abuso con los visitantes, sin que nadie intervenga ni trate de corregir la situación.
El comportamiento es similar al de los llamados mercados populares, que venden los vegetales y frutas más caros que los supermercados, donde usted compra los productos empaquetados, mejor presentados, en un ambiente de aire acondicionado, lo cual plantea una contradición
Pagar mas por algo adquirido en un lodazal y con tanta insalubridad, cuando debería ser lo contrario.
Todo con la excusa de que son “humildes padres de familia” los que así proceden.
Vaya usted a ver la manera en que practican  su humildad.

1 comentario:

  1. Hay que arrancarle Los granos a cada UNO de esos perversos. Y al capotillero tambien por Marica.

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NIURKA BAEZ,
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